Una de las tareas de mantenimiento por la que debe pasar todo vehículo es la del cambio de líquido refrigerante del radiador, a fin de garantizar el buen funcionamiento del motor. Sin embargo, si tras realizar esta tarea el motor presenta sobrecalentamiento, es probable que se haya incurrido en algún error durante el proceso.
En este artículo, Radiadores Fortaleza, empresa peruana líder en la fabricación, reparación y mantenimiento de radiadores e intercambiadores de calor, explica en detalle las posibles causas de este problema y las soluciones que puedes seguir.
Una de las razones más comunes de sobrecalentamiento es que se hayan quedado burbujas de aire en el sistema por lo que deberías descartar esta sospecha.
Recuerda que este aire atrapado en el sistema de enfriamiento puede impedir que el refrigerante circule adecuadamente, generando "puntos calientes" donde el motor se sobrecalienta. Estos puntos calientes son áreas donde el motor no está siendo enfriado correctamente, lo que lleva al sobrecalentamiento.
Purgar el sistema de enfriamiento es determinante para eliminar cualquier burbuja de aire. La mayoría de los vehículos tienen un procedimiento específico para esto, que puede incluir abrir un tornillo de purga mientras se rellena el radiador o usar un embudo especial que se coloca en el radiador para permitir que el aire escape mientras se llena con refrigerante.
El termostato, componente vital del sistema de refrigeración, regula el flujo de refrigerante hacia el radiador. Sin embargo, si se instala de manera incorrecta durante el cambio de refrigerante o si está defectuoso, puede dar lugar a problemas de sobrecalentamiento del motor.
También, en caso no se haya llenado completamente el sistema, se debe tener en cuenta que queda un espacio entre el termostato y el motor que podría no haber recibido el volumen de refrigerante necesario.
Para abordar este problema, primero verifica si el termostato está instalado correctamente y en buen estado. Asegúrate de que esté orientado correctamente y que los sellos estén en su lugar. Si el termostato parece estar funcionando mal, considera reemplazarlo. Además, asegúrate de llenar completamente el sistema de enfriamiento con refrigerante, ya que un espacio de aire entre el termostato y el motor puede causar problemas de circulación de refrigerante.
El ventilador del radiador desempeña un papel crucial en la regulación de la temperatura del motor al ayudar a mantener el flujo de aire a través del radiador. Especialmente cuando el vehículo está en ralentí o moviéndose lentamente, el ventilador entra en acción para disipar el calor acumulado. Sin embargo, si el ventilador no funciona correctamente, ya sea debido a un fallo en el motor del ventilador, un sensor defectuoso o un problema eléctrico, el motor puede sobrecalentarse rápidamente.
Es necesario identificar y corregir la causa subyacente de la falla del ventilador del radiador. Esto puede implicar la sustitución del motor del ventilador, la reparación o reemplazo de fusibles y relés defectuosos, la solución de problemas en el sistema eléctrico del vehículo o la reparación del sensor de temperatura. Es importante realizar un diagnóstico adecuado para determinar la causa exacta del fallo y tomar las medidas correctivas necesarias para evitar futuros problemas de sobrecalentamiento del motor.
El sensor de temperatura del motor monitorea la temperatura del refrigerante y envía esta información al módulo de control del motor (ECM). Un sensor defectuoso puede enviar señales incorrectas, lo que puede llevar a una sobreestimación de la temperatura del motor.
Primero es necesario realizar una prueba del sensor de temperatura para asegurarse de que esté funcionando correctamente. Esto puede implicar el uso de herramientas de diagnóstico para verificar la lectura del sensor mientras el motor está en funcionamiento. Si se determina que el sensor está defectuoso y está enviando señales incorrectas al módulo de control del motor (ECM), entonces la solución sería reemplazar el sensor de temperatura.
Es otro de los errores más comunes. Elegir un tipo de refrigerante que no es adecuado para el vehículo específico puede afectar la capacidad del sistema de enfriamiento para mantener la temperatura adecuada del motor. Existen diferentes tipos de refrigerantes, y cada uno tiene una composición química distinta.
Es crucial asegurarse de usar el tipo de refrigerante recomendado por el fabricante del vehículo para garantizar un funcionamiento óptimo del sistema de enfriamiento y evitar problemas relacionados con el uso de un refrigerante incorrecto. Si tienes dudas sobre el tipo de refrigerante adecuado para tu vehículo, comunícate con uno de los asesores de Radiadores Fortaleza para poder absolver todas tus interrogantes.
Por lo general, el refrigerante debe mezclarse con agua en una proporción específica, de 50:50. Una mezcla incorrecta puede afectar la eficiencia del sistema de enfriamiento. Una proporción errónea puede hacer que el refrigerante pierda sus propiedades térmicas y anticongelantes.
Drena el sistema de enfriamiento y llénalo con la mezcla correcta de refrigerante y en lo posible emplea agua destilada. El agua del grifo puede contener minerales que pueden provocar corrosión o depósitos en el sistema de enfriamiento.
Los residuos o sedimentos pueden causar obstrucciones en el radiador o en las mangueras del sistema de enfriamiento, impidiendo el flujo fluido del refrigerante.
Inspecciona el radiador y las mangueras en busca de obstrucciones. Si es necesario, realiza un enjuague del radiador para limpiar cualquier residuo. En casos graves, puede ser necesario reemplazar las mangueras o el radiador.
La bomba de agua es esencial para la circulación del refrigerante en todo el sistema de enfriamiento. Si está defectuosa, el refrigerante no circulará con el caudal que debe tener, lo que provocará el sobrecalentamiento del motor.
Inspecciona la bomba de agua para detectar signos de desgaste o fallos. Sustituye la bomba de agua si es necesario. Es importante también revisar la correa que impulsa la bomba de agua para asegurarse de que está en buen estado y correctamente tensada.
La tapa del radiador mantiene la presión adecuada en el sistema de enfriamiento. Si está defectuosa, la presión puede no ser suficiente para evitar el sobrecalentamiento.
Verifica la tapa del radiador y reemplázala si muestra signos de desgaste o no mantiene la presión adecuada.
Un radiador dañado puede ser una causa significativa de sobrecalentamiento del motor. Los daños comunes en el radiador incluyen aletas dobladas, fugas en el núcleo o en las juntas, obstrucciones en los conductos internos, o incluso corrosión en el metal. Cualquiera de estos problemas puede provocar una disminución en la eficiencia de enfriamiento del radiador, lo que a su vez puede llevar al sobrecalentamiento del motor.
La solución principal para un radiador dañado es realizar una inspección detallada para identificar cualquier daño físico o signos de deterioro. Esto implica examinar visualmente el radiador en busca de aletas dobladas, fugas de líquido refrigerante, o cualquier otro tipo de daño visible.
Si se encuentra algún daño, se deben tomar medidas para reparar o reemplazar el radiador. Las reparaciones pueden implicar enderezar aletas dobladas, sellar pequeñas fugas con soldadura o selladores especiales, o reemplazar juntas o partes dañadas. En casos más graves de daño estructural, puede ser necesario reemplazar completamente el radiador.
En síntesis, los radiadores industriales con tubos intercambiables brindan muchas ventajas que los hacen una opción atractiva para una amplia gama de aplicaciones industriales. Su facilidad de mantenimiento, mayor durabilidad, flexibilidad en el diseño, eficiencia operativa, reducción de costos operativos, impacto ambiental positivo y mejora en la seguridad operativa los posicionan como una solución avanzada y eficiente en la gestión térmica industrial.
En conclusión, tienes que saber que cambiar el líquido refrigerante del radiador es un mantenimiento rutinario. Cuida el proceso desde la elección del refrigerante y su mezcla adecuada hasta la eliminación de burbujas de aire, cada paso es fundamental para el funcionamiento óptimo del sistema de enfriamiento. Si después de seguir estos pasos el problema persiste, es recomendable buscar la ayuda de un experto. Si es tu caso, puedes comunicarte con los asesores especializados que Radiadores Fortaleza cuenta para ti.